Es una palabra que escuchamos cada vez más en nuestros círculos de amistades, en el trabajo, o incluso en la familia: "auto-cuidado" o "self-care". Pero ¿qué significa realmente este concepto, de dónde viene, y cómo podemos llevarlo a la práctica en nuestros hogares, sin aportar a la industria del testeo animal en cosmética? Te lo contamos a continuación.
Aunque fue en 2016 que esta palabra llegó a su masificación, en la década del '60 este término ya se usaba entre los movimientos feministas y de derechos civiles, como también en el área de salud mental, específicamente aplicado a los cuidadores de pacientes que requerían atención de larga duración o tenían escasa movilidad. Una forma de tratar el estrés de estos cuidadores fue a través de la noción de auto-cuidado.
De esta forma, este concepto se fue masificando hasta volverlo algo personal; algo que se puede practicar en la privacidad del hogar, desde prepararse una tasa de té, leer un libro o, como Alicia Keys, llevar a cabo una rutina facial en la privacidad de nuestro baño, mientras encendemos unas velas aromatizantes. La idea es que tú misma/o descubras qué significa para ti auto-cuidado, y cómo hacerlo parte de tu rutina diaria. Aquí te damos algunas ideas:
Rutina facial: ¿una forma de meditación moderna?
Siempre digo que el momento donde puedo pensar más claramente sobre mi vida o mi día, es mientras aplico cada uno de los productos de mi rutina facial, en la mañana y en la noche. Aunque menos elaborada que la de Alicia Keys, también me gusta crear un ambiente especial mientras cuido mi piel. Me encierro en mi pieza, pongo música tranquila, y mientras aplico mis serums y cremas, pienso de manera consciente que, al cuidar mi piel, también me estoy cuidando a mí misma.
La congresista de Estados Unidos, Alexandria Ocasio-Cortez, no es la excepción a este estilo de vida. En 2018, después de ganar las elecciones y convertirse en la congresista más joven en la historia de su país, declaró que el auto-cuidado no solo sería una prioridad, sino que una forma de vida no negociable. Parte de eso es su rutina facial, la cual definió como uno más de sus hobbys, e incluso llegó a compartirla en sus historias de Instagram.
Si ya tienes una rutina y quieres probar nuevos productos, o aún no sabes por dónde empezar, nosotros recomendamos optar siempre por opciones libres de testeo animal e, idealmente, veganas. Equusmare y Biofilia tienen una gran variedad de productos para una rutina facial completísima, desde limpiadores de rostro, serums ultra hidratatantes, y cremas que mantienen la piel tersa y luminosa.
Hygge: un estilo de vida que llegó para quedarse
El mismo año en que la palabra "auto-cuidado" comenzó a llegar a todas las librerías y conversaciones, 2016, también lo hizo el libro "Hygge: la felicidad en las pequeñas cosas", de Mike Wiking, el cual se convirtió en un éxito de ventas instantáneo a nivel mundial. No solo era un objeto de colección en sí mismo (su tamaño es relativamente pequeño, con tapa dura e ilustraciones en colores azul y dorado), sino que también venía a instalar una idea tan extraña y fascinante como su nombre: la idea de generar espacios acogedores y de calma tanto en nuestro hogar como en nuestra forma de relacionarnos con nuestros seres queridos y el mundo que habitamos.
Los daneses lo san sabido durante siglos, mucho antes de que apareciera Marie Kondo: para realmente disfrutar el presente, y hacer de nuestras vida un conjunto de experiencias significativas, necesitamos rodearnos de objetos y personas que nos traigan felicidad y paz, partiendo por nosotros mismos y nuestra disposición.
Una forma de llevar a la práctica este estilo de vida es poner atención a nuestro entorno: ¿Me gusta cómo he decorado mi habitación? ¿Me trae calma cuando estoy en ella? ¿Soy feliz ahí? Si la respuesta a esas preguntas es NO, entonces es momento de reemplazar todos esos objetos que se fueron acumulando sin una razón, para dar paso a otros que sí tienen un espacio en tu corazón o necesidades más inmediatas. En el libro, el autor recomienda usar materiales nobles como madera y plantas para decorar, además de velas o luces tenues.